Mientras que el feminismo liberal se queda en los márgenes de la proclamada "igualdad de oportunidades", es decir, igualdad jurídica (formal) que no garantiza la real igualdad social; el feminismo socialista se ocupa no sólo de la lucha por la igualdad legal, sino por asegurar medidas efectivas que garanticen los derechos humanos de las mujeres, en especial de las trabajadoras y las pobres, quienes constituyen el grueso de la población femenina de nuestras sociedades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario